Los cráteres de Yamal son una serie de agujeros circulares y profundos que se encuentran en la península de Yamal, en el norte de Rusia. El término "Yamal" significa "fin del mundo" en el idioma Nenets, que es hablado por los pueblos indígenas de la región.
Los cráteres de Yamal se descubrieron por primera vez en 2014, y desde entonces han sido objeto de gran interés y especulación. Se cree que estos agujeros se formaron por la liberación de gas metano atrapado en la tundra, que al salir creó una explosión que dejó un cráter. Otros han sugerido que los cráteres se formaron debido al derretimiento del permafrost, una capa de suelo congelado que se encuentra en el Ártico y que ha estado descongelándose debido al cambio climático.
Aunque aún no se ha establecido la causa exacta de la formación de los cráteres de Yamal, se ha observado que están aumentando en número y tamaño. Se han descubierto más de una docena de cráteres en la región, y algunos de ellos tienen más de 50 metros de diámetro y más de 60 metros de profundidad.
Los cráteres de Yamal son importantes para la investigación científica, ya que proporcionan información valiosa sobre la historia geológica y climática de la región. También son un recordatorio de los impactos del cambio climático en el Ártico y la necesidad de abordar la crisis climática de manera urgente.
Los cráteres de Yamal han sido objeto de mucha especulación y teorías desde que aparecieron por primera vez en 2013. Aunque se han realizado estudios y se han propuesto diversas hipótesis, todavía no hay una explicación definitiva para su origen.
Entre las creencias y teorías más populares sobre los cráteres de Yamal se encuentran:
- El impacto de un meteorito: Algunos sugieren que los cráteres se formaron como resultado del impacto de un meteorito. Sin embargo, esta teoría ha sido descartada por los expertos, ya que no se han encontrado signos de impacto en la zona.
- Erupción de gas: La teoría más aceptada es que los cráteres se formaron como resultado de una erupción de gas. Se cree que el gas metano atrapado en el permafrost de la zona se liberó, lo que causó una explosión y la formación del cráter. Esta explicación es respaldada por el hecho de que se ha detectado un aumento en los niveles de metano en la zona.
- Actividad extraterrestre: Como con muchos fenómenos inexplicables, ha habido teorías que sugieren que los cráteres de Yamal son el resultado de actividad extraterrestre. Sin embargo, esta explicación carece de evidencia científica y se considera poco probable.
En resumen, aunque no hay una explicación definitiva para la formación de los cráteres de Yamal, la teoría más aceptada es que se deben a la liberación de gas metano atrapado en el permafrost.
Científicos rusos están averiguando que está pasando. Han creado un modelo en 3d a escala real del agujero negro de Yamal. El pozo examinado es único porque está en perfectas condiciones. No estaba lleno de agua y tiene unos 30 metros de profundidad. En la región de Yamal se han formado 17 cráteres durante los últimos 10 ó 15 años. Crea escepticismo pero es muy interesante. Es una sensación que da miedo porque no es nada parecido a lo que hemos visto antes. Es un agujero enorme. Los pastores de renos que viene en la zona creen que el universo se compone de tres niveles:
- El mas alto, alberga los Dioses
- En medio residen los humanos
- En el inferior los espiritus malignos capaces de entrar en nuestro nivel
Es normal que piensen así porque a veces la tierra tiembla, o ven relámpagos y cosas naturales que no comprenden. Los lugareños, llamados nenets piensan que quizá Dios les está castigando cuando las bajas temperaturas hacen que fallezcan los renos de la zona. Son nómadas y se refieres así mismo como los hijos de los renos. Su modo de vida se basa en las tradiciones y comen carne cruda de reno. La sangre del reno tiene mucho poder y es un elixir que les protege del escorbuto y del déficit vitamínico.
Una antropóloga en la zona pudo observar la formación de un lago con sus propios ojos una noche después de un fuerte ruido. Durante 3 días se podía ver el agujero, al cuarto día se oyó otro fuerte ruido y el agua del lago de al lado pasó al agujero y aquel se secó. Fué el resultado de fuerzas terrestres o celestiales o quizá del inframundo. Una mujer dice que vio al espíritu del lago, y dijo que era aterrador.
Los lugareños creen que al tomar más cosas de la tierra de las que ésta nos ofrece puede provocar estas cosas. La gente del pueblo no son muy habladores. En el norte suelen haber muchos derrumbes y movimientos sísmicos que derivan en cráteres. La tierra alrededor de estos cráteres puede derrumbarse de repente así que es peligroso acampar cerca.
Los cráteres parece que están hechos por máquinas fabricadas por seres humanos o como si hubiera creado un meteorito y por supuesto hubo teorías que decían que había sido creado por alienígenas o por fuerzas sobrenaturales. Los primeros investigadores temían por su hubiera gases asfixiantes pero vieron que no. Al bajar una cámara atada a una cuerda vieron que en el fondo había otro agujero más profundo y creían que de ahí podían salir demonios.
Se cree que la creación fue por un mecanismo de origen gaso-dinámico y no criogénico. Que fue causado por la acumulación de gas debajo de la superficie. Es como un balón de goma que al inflarse se expande. Lo mismo pasa en la tierra, la presión del gas hace que las cavidades subterráneas se expandan y esa es la clave para entender la naturaleza de este fenómeno. Lo que precede a la formación de los cráteres son los llamados montículos de permafrost. La presión del gas aumenta y por eso empieza a empujar contra el estrato superior donde se encuentra, y si no es muy denso lo deforma y crea una colina. A través de imágenes del satélite vieron que a cada cráter le precedía esta colina y que cada caso es único. Pero aún la respuesta no esta clara del todo.
Los científicos llevan años investigando cómo se forman estos agujeros. Saben que el elemento clave es el metano. Hay capas de hielo y gracias a la plasticidad del materiales crecen en lugar de explotar instantáneamente.
La zona es peligrosa. Pueden pasar entre 3 y 50 años entre la formación del montículo de permafrost y su explosión, y cuando explota pueden salir fragmentos de roca despedidos a 300, 500 o a 900 metros del lugar como ya sucedió en una ocasión. Son erupciones muy fuertes que ponen en riesgo la vida humana. Hay muchos montículos formados en la Península de Yamal.
No parece que la formación de estos cráteres tenga que ver con la intervención del ser humano como piensan algunos por la extracción de gas por parte del hombre en zonas contiguas. A causa del cambio climático podrían acelerarse estas formaciones.